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Los riesgos de humedad en vehículos de ocasión

Comprar un vehículo de ocio de segunda mano puede ser una excelente forma de ahorrar, pero también conlleva ciertos riesgos, especialmente relacionados con las infiltraciones. Este artículo explica por qué y cómo evitarlas.

Los peligros ocultos de la humedad

Incluso si un vehículo de ocasión parece estar en buen estado, puede ocultar problemas de humedad. Las infiltraciones no detectadas pueden causar moho, deterioro de materiales e incluso graves daños estructurales. Por eso es esencial exigir un control reciente realizado por un profesional.

Consejos para comprar un vehículo de segunda mano

  • Pregunte por el lugar de estacionamiento habitual del vehículo cuando no se utiliza. El simple hecho de estar bajo cubierta durante el invierno puede secar infiltraciones anteriores… sin haberlas reparado.

  • Inspección visual minuciosa : Busque señales visibles de humedad: manchas, olores a moho, óxido. Levante los cojines, los colchones, inspeccione el fondo de armarios y compartimentos. Presione con los dedos las paredes, trampillas y el suelo del garaje trasero… Si se hunden al tacto… ¡huya!
  • Desconfíe de las reparaciones “caseras” que pueden ocultar problemas graves.
  • Solicite las facturas de todas las reparaciones realizadas.
  • Exija al vendedor un VERDADERO informe de control de humedad para garantizar que el vehículo está en buen estado.

  • Recurra a un profesional Contacte con un especialista cercano, equipado con nuestro sistema de control de humedad, para una inspección fiable.

Comprar un vehículo de ocio de segunda mano puede ser una excelente opción, siempre que se tomen las precauciones necesarias para evitar sorpresas desagradables.

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